Hierro en el embarazo

Importancia de tomar hierro en el embarazo (+Dosis recomendada)

Una alimentación adecuada y balanceada durante el embarazo es fundamental para la salud y el bienestar de la madre y del bebé. A continuación, conoceremos la importancia de tomar hierro en el embarazo y cuáles son las dosis recomendadas.

¿Cuál es la importancia de tomar hierro en el embarazo?

Para comprender la importancia de tomar hierro en el embarazo primero debemos entender que la gestación es un proceso durante el cual tanto el bebé en formación como la madre experimentan numerosos cambios fisiológicos y una mayor demanda de nutrientes, especialmente, vitaminas y minerales.

En este sentido, el hierro es uno de los minerales más importantes para el ser humano, debido a que es un componente esencial de muchas proteínas, y enzimas, las cuales desempeñan numerosas funciones vitales, tales como:

  • El transporte del oxígeno en la sangre.
  • La producción de energía.
  • La síntesis del ADN.

Durante la gestación aumenta el volumen de sangre de la madre para poder sostener el desarrollo del feto y se incrementan las necesidades del hierro a medida que el embarazo transcurre, por tanto, si la madre no ajusta su alimentación a los nuevos requerimientos fisiológicos, puede presentar un déficit de hierro significativo, e incluso tener anemia, lo cual puede tener efectos graves sobre la salud de la madre y del bebé.

Efectos del déficit de hierro durante el embarazo

En el caso de la madre, el déficit de hierro durante el embarazo le puede ocasionar anemia, una condición de salud asociada a una disminución de la hemoglobina en la sangre, en la mayoría de casos .

La hemoglobina es la proteína que permite la captación y transporte del oxígeno. Se estima que dos tercios de todo el hierro del organismo está presente en la hemoglobina.

De acuerdo con estudios médicos recientes, la anemia afecta a más de 32 millones de mujeres embarazadas en el mundo, tiene una mayor incidencia en países de menores recursos y aumenta considerablemente el riesgo de mortalidad de la madre durante la gestación, el parto o en la semana posterior al alumbramiento, así como el riesgo de depresión postparto.

En el caso del bebé, el déficit de hierro durante el embarazo también está asociado con:

  • Un mayor riesgo de mortalidad infantil.
  • Mayor probabilidad de nacimiento prematuro.
  • Bajo peso al nacer.
  • Trastornos del desarrollo neurológico. 

¿Qué beneficios aporta a la madre y al feto el hierro en el embarazo?

Veamos a continuación los beneficios que aporta el hierro al feto y a la madre durante el embarazo.

Previene la anemia

Un consumo adecuado de hierro ayuda a prevenir la anemia tanto en la madre como en el feto y de esta manera se evitan los efectos adversos descritos anteriormente. Adicionalmente, el hierro contribuye al desarrollo del feto.

Interviene en el metabolismo energético

El hierro es un elemento fundamental de los citocromos, unas enzimas necesarias para la producción de energía a nivel celular, así como para el metabolismo de numerosas sustancias bioquímicas esenciales para las funciones vitales.

Estas sustancias bioquímicas incluyen los ácidos grasos, las prostaglandinas, los esteroides, la vitamina A, la vitamina D, la vitamina K, entre otras.

Contribuye en el desarrollo neurológico

El hierro es fundamental para la producción de glóbulos rojos y el tejido sanguíneo, pero también para la producción de las células nerviosas, necesarias para la formación del cerebro, la médula espinal y otros órganos del sistema nervioso, así como también la formación y síntesis de los neurotransmisores.

En este sentido, una ingesta apropiada de hierro durante el embarazo contribuye al desarrollo neurológico del feto, previene trastornos cognitivos en el bebé y protege al sistema nervioso de la madre.

Participa en el metabolismo de las células

El hierro es necesario para el crecimiento y división celular, la producción y síntesis del ADN, así como para ciertas funciones del sistema inmunológico.

De esta manera, es indispensable un consumo adecuado de hierro durante la gestación para promover un saludable desarrollo celular del feto, así como para fortalecer el sistema inmune del bebé y de la madre.

¿Cuál es la dosis recomendada para ingerir hierro en el embarazo?

La dosis recomendada para la ingesta de hierro durante el embarazo es de 27 miligramos diarios en mujeres gestantes de todas las edades, basados en los valores recomendados por las Ingestas Dietéticas de Referencia (IDR).

Con base en las IDR se establecen los Consumos Diarios Recomendados (CDR), los cuales están comprobados por suficientes estudios y evidencias científicas. Cuando los estudios o las evidencias científicas no son suficientes o no son concluyentes, se establecen unas estimaciones de Ingestas Adecuadas (IA).

A continuación, se presenta una tabla con las dosis de hierro diarias recomendadas, basadas en los CDR o IA, de acuerdo con el rango de edad de cada grupo de personas.

Tabla 1. Dosis diarias recomendadas para la ingesta de hierro.

Etapa de vidaEdadDosis recomendada
Infantes0 a 6 meses0,27 mg/día     (IA)
Infantes7 meses a 1 año11 mg/día
Niñas y niños1 a 3 años7 mg/día           (IA)
Niñas y niños4 a 8 años10 mg/día
Niñas y niños9 a 13 años8 mg/día
Mujeres14 a 18 años15 mg/día
Mujeres19 a 50 años18 mg/día
Mujeres51 años o más8 mg/día
Mujeres embarazadasTodas las edades27 mg/día
Mujeres lactantes14 a 18 años10 mg/día
Mujeres lactantes19 años o más9 mg/día

¿Cómo consumir hierro en el embarazo?

Existen cuatro formas de consumir hierro durante el embarazo.

  • Consumo de hierro hemo.
  • Consumo de hierro no hemo.
  • Consumo de suplementos de hierro por vía oral.
  • Consumo de hierro por vía intravenosa.

Consumo de hierro hemo

El hierro en forma hemo se encuentra disponible en los alimentos de origen animal, en especial, en las carnes rojas, vísceras (en particular, el hígado de res), aves, pescados y ciertos productos del mar, tales como almejas, ostras y mejillones.

En general, el organismo absorbe más fácilmente el hierro en su forma hemo, y su absorción está menos influenciada por otros factores de la alimentación que la del hierro no hemo.

Consumo de hierro no hemo

El hierro en forma no hemo se encuentra en los alimentos de origen vegetal, en especial, en las verduras de hojas verde oscuro, tales como la espinaca, la acelga, los berros, el brócoli; en las leguminosas, como las lentejas y los frijoles; y en los cereales y alimentos fortificados.

El hierro no hemo es más difícil de absorber y dicha absorción está más influenciada por otros factores de la alimentación que la asimilación del hierro hemo.

A continuación, se presenta una tabla con las cantidades de hierro presentes en algunos alimentos ricos en este mineral esencial.

Tabla 2. Algunos alimentos ricos en hierro.

AlimentoPorciónCantidad de hierro (mg)
Tofú1/2 taza6,6 mg
Espinacas (cocidas)1 taza6,4 mg
Mejillones (cocidos)3 onzas5,7 mg
Hígado1 onza3,6 mg
Pollo1 onza3,6 mg
Lentejas (cocidas)1/2 taza3,3 mg
Frijoles (cocidos)1/2 taza3,3 mg
Almejas (cocidas)3 onzas2,4 mg
Jugo de ciruelas6 onzas fluidas2,3 mg
Acelgas (cocidas)1/2 taza2,0 mg
Papas (cocidas con piel)1 mediana1,8 mg
Carne de res3 onzas1,6 mg
Atún (enlatado en agua)3 onzas1,3 mg
Avellanas (secas tostadas)1 onza1,3 mg
Pasas (sin semilla)1,5 onzas0,8 mg
Ciruelas secas1,7 onzas0,4 mg

Consumo de suplementos de hierro por vía oral

El médico o especialista de la salud puede recomendar el consumo de suplementos nutricionales a aquellas personas que presentan deficiencias de hierro. Los suplementos de hierro más comunes son el fumarato ferroso, el gluconato ferroso, el polimaltosado y el sulfato ferroso.

En el caso de las mujeres embarazadas, los especialistas recomiendan el consumo intermitente de suplementos de hierro durante la gestación para evitar la ferropenia y la anemia ferropénica, las cuales son condiciones de salud peligrosas, tanto para la madre como para su bebé, asociadas a la deficiencia de hierro.

Estos suplementos de hierro generalmente se presentan en forma de comprimidos (tabletas normales, tabletas recubiertas o tabletas de liberación prolongada), en cápsulas o líquido (en gotas o en elixir) para su consumo por vía oral.

Consumo de suplementos de hierro por vía intravenosa

En algunos casos, el médico o especialista de salud puede indicar la administración de los suplementos de hierro por vía intravenosa.

Esto ocurre generalmente cuando la persona no tolera el consumo de los suplementos de hierro por vía oral, si tiene problemas gastrointestinales, o si fue sometida a operaciones de bypass gástrico o intervenciones quirúrgicas en el intestino delgado.

¿Qué otras vitaminas prenatales son importantes?

Además del hierro existen otras vitaminas prenatales de gran importancia para la salud general de la madre y el desarrollo del feto. Algunos son:

  • Ácido fólico: es un nutriente indispensable para el crecimiento del feto, para la síntesis del ADN y del ARN de las células, y ayuda a prevenir los defectos del tubi neural, que son malformaciones graves del sistema nervioso. 
  • Vitamina C: es una sustancia hidrosoluble necesaria para numerosas funciones enzimáticas, es un antioxidante natural y también favorece la absorción del hierro no hemo presente en los alimentos de origen vegetal.
  • Vitamina D: es un nutriente esencial para la absorción del calcio y del fósforo en el organismo y, por lo tanto, para el buen funcionamiento de los huesos, el sistema inmunológico, el sistema endocrino y el sistema cardiovascular.
  • Calcio: es un mineral de gran importancia para la formación de los huesos y los dientes. 
  • Magnesio: forma parte de los huesos, interviene en el metabolismo de los carbohidratos y las grasas y es necesario en la producción de la energía celular, entre otras funciones esenciales para la vida.

Comentarios finales

Durante la gestación y, posteriormente, durante el período de lactancia, es indispensable la ingesta adecuada de vitaminas y minerales para garantizar la salud y el bienestar de la madre y del bebé.

En algunos casos, incluso si la madre lleva una alimentación balanceada, es posible que necesite suplementos de vitaminas y minerales. Esto se debe a que sus requerimientos nutricionales aumentan tanto para sostener la formación y el desarrollo del bebé, así como para adaptarse a los cambios fisiológicos que experimenta el organismo de la madre.

El médico especialista es el profesional de la salud que debe evaluar a la madre y al bebé en formación para poder indicar cuáles suplementos nutricionales son adecuados, y cuáles son las dosis recomendables en cada caso, tomando en cuenta las características particulares y el estado de salud general de la madre y su bebé.

Para mayor información sobre los beneficios del hierro, o si deseas conocer cuáles son los síntomas de la deficiencia de hierro en el organismo, puedes visitar nuestro blog en el siguiente enlace.

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