El zinc es un micronutriente que desempeña un papel crucial en diversas funciones biológicas. Además, ha demostrado ser esencial para mantener la salud del sistema inmunológico. En este artículo, explicaremos qué es el zinc, su importancia, por qué es un aliado excepcional para nuestro sistema de defensa y cómo se puede incorporar de manera efectiva en la dieta.
¿Qué es el zinc?
El zinc es un oligoelemento que se encuentra en pequeñas cantidades en diversos alimentos y es esencial para el funcionamiento adecuado del organismo. Actúa como cofactor o “molécula auxiliar” en más de 200 enzimas, lo que implica que participa activamente en una amplia variedad de procesos metabólicos del cuerpo humano.
Funciones del zinc
El zinc participa activamente en procesos como la división celular y la reparación de tejidos. Además, este mineral ayuda al sistema inmunológico a defenderse de bacterias y virus, interviene en la producción de ADN y proteínas (1). El zinc, además, interviene en la función cognitiva y la percepción del gusto y el olfato. También ayuda a proteger la barrera intestinal, lo que contribuye a la prevención de infecciones en esa zona.
El zinc y el sistema inmune
Uno de los aspectos más destacados del zinc es su impacto positivo en el sistema inmune. Este mineral es esencial para la producción y la función de los glóbulos blancos, las células responsables de combatir infecciones y enfermedades.
Además, el zinc regula la liberación de citocinas, que son proteínas que controlan el crecimiento de otras células inmunitarias y sanguíneas, por lo que tienen un papel crucial en el combate de células cancerosas (2).
Por estas razones, la deficiencia de zinc puede comprometer la función inmunológica, abriendo la puerta a infecciones y al desarrollo de enfermedades, como resfriado común, neumonía, diarrea, VIH, etc.
Alimentación y suplementación: las claves para obtener zinc
La buena noticia es que el zinc se encuentra en muchos alimentos, lo que facilita su incorporación en la dieta diaria. Algunas fuentes ricas en zinc son la carne de res, pollo y pescado; las nueces, semillas y productos lácteos como leche, queso y yogur. Los vegetarianos, por su parte, pueden optar por fuentes como legumbres, cereales integrales y productos fortificados.
No obstante, algunas personas pueden tener dificultades para obtener suficiente zinc solo con los alimentos. En esos casos, los suplementos de zinc pueden ser una opción.
En ese sentido, es posible conseguir suplementos solo de zinc, bien sea en forma de sulfato, gluconato o acetato de zinc. También se puede encontrar en suplementos de multivitaminas y minerales que lo incluyan en su formulación.
Sin embargo, a pesar de que es posible compensar la deficiencia de zinc con suplementos, es esencial consultar con un profesional de la salud para determinar la dosis adecuada, ya que el exceso de zinc también puede ser perjudicial.
Recomendaciones
Para aprovechar al máximo los beneficios del zinc para el sistema inmune, se requiere una dieta equilibrada y variada. También es importante destacar que, si bien el zinc es un aliado valioso para el sistema inmune, no es el único medio de defensa. Mantener un estilo de vida saludable sigue siendo el factor clave para fortalecer la inmunidad de manera integral.
Referencias
- 1. National Institutes of Health. Zinc [internet]. USA: Office of Dietary Supplements [04 de octubre de 2022; consultado 15 noviembre de 2023]. Disponible en https://ods.od.nih.gov/factsheets/Zinc-DatosEnEspanol/#h4
- 2. American Cancer Society. Citocinas y sus efectos secundarios [internet]. USA: [27 de diciembre de 2019; consultado 15 noviembre de 2023]. Disponible en https://www.cancer.org/es/cancer/como-sobrellevar-el-cancer/tipos-de-tratamiento/inmunoterapia/citocinas.html